El cierre ArdeaSeal, ideado para garantizar la excelencia de los vinos de calidad, se aprecia y utiliza hoy en día no solo por productores de vino sino también por importantes productores de aceite de oliva, de cerveza y de bebidas alcohólicas. Este es el resultado de un proyecto que ha sabido, con sus contenidos en innovación y tecnología, satisfacer las exigencias de otros mercados importantes.
Embotellado
El cierre ArdeaSeal se aplica en las líneas de embotellado tradicional con una adaptación que simplifica el proceso: se substituye el grupo de compresión (normalmente cuatro mordazas con cierre de diafragma) por un simple dispositivo centrador tronco-cónico (embudo).
Este dispositivo elimina las partes en movimiento que necesitan lubricación y manutención y, sobre todo, se elimina un riesgo a menudo infravalorado: las mordazas con un mantenimiento insuficiente o desgastadas pueden lastimar el tapón afectando sus propiedades técnicas.
Los constructores de encorchadoras como Arol, GAI, Bertolaso en Italia, Stone y Costral en Francia, han realizado kits específicos para ArdeaSeal y han construido sistemas de taponado que implementan su uso. El cierre ArdeaSeal se alimenta orientado en línea de embotellado. También en este caso los constructores más conocidos como Mar.Co., Faccio, Neri, Cames, etc. han desarrollado equipos que responden a esta necesidad o han adaptado alimentadores/orientadores existentes.
El cierre se extrae con el sacacorchos tradicional y se puede volver a colocar fácilmente cuando se quiera cerrar la botella.
Para disfrutar de su botella con el obturador ArdeaSeal (ver imagen), utilizar el sacacorchos tradicional.
Se recomienda perforar el escudo para lograr una mejor adherencia, retirar el corcho como de costumbre.